¿Cómo nos afectan las creencias limitantes? 6 Maneras de cambiarlas
¿Por qué nos afectan las creencias limitantes? ¿Qué podemos hacer para afrontarlas? Descubre los ejemplos más comunes y cómo cambiarlas.
Una creencia limitante implica que las personas acaben desistiendo en sus metas personales porque no se ven capaces de conseguirlas. De esta forma, las personas que tienen estas creencias hacia sí mismas pueden ver perjudicada tanto su autoestima como sus relaciones con los demás. Pero, ¿por qué las tenemos y cuáles son las más comunes?
¿Qué son las creencias limitantes?
Las creencias limitantes pueden llegar a afectar tanto a una persona que acabe dejando de lado sus propios sueños, perjudicando las relaciones con las personas más próximas y no poder cambiar aquello que no te gusta en tu vida.
La mayoría de creencias limitantes son principalmente negativas. Tanto es así que cuando alguien tiene estos pensamientos hacia sí mismo/a suele acabar manteniéndose en su zona de confort, lo que impide que vivamos nuevas experiencias o aumentemos nuestros conocimientos. A la larga, esto acaba perjudicando tanto nuestra autoestima como nuestro crecimiento personal.
En muchos casos, los diferentes tipos de creencias limitantes acaban actuando como un mecanismo de defensa para protegernos del dolor. Esto es debido a que hemos pasado por experiencias negativas en nuestro pasado e intentamos evitar de manera inconsciente de que nos volvamos a dañar. De esta forma, estos sentimientos pueden llegar a conducir a emociones negativas como puede ser el síndrome del impostor, trastornos de ansiedad y la procrastinación constante.
¿Por qué deberías cambiar tus creencias limitantes?
Las creencias limitantes que tenemos sobre nosotros mismos pueden hacer que las personas acaben no afrontando diferentes retos que podrían conllevar una mejora en sus vidas. Principalmente, las creencias limitantes pueden impedir lo siguiente:
- Alcanzar nuestro máximo potencial: Limitarse en diferentes ámbitos. Tanto a nivel personal, relacional como profesional. Esto impida que una persona pueda conseguir un mejor trabajo, hacer nuevos amigos/as o incluso mejorar hábitos que pueden suponer una mejora en su bienestar mental y físico.
- Miedo al fracaso: Todas las personas sentimos ciertos miedos al afrontar un nuevo reto debido al temor de cometer un error. Pero, cuando existe una creencia limitante, esto puede sentirse ante en cualquier ámbito.
- Salir de la zona de confort: Las creencias limitantes hacen que las personas no salgan de sus rutinas diarias, creando menos oportunidades para crecer y sentirse más realizadas.
- Tener problemas para tomar decisiones: Las creencias limitantes pueden acabar sesgando nuestras decisiones, lo que impide que estas sean lo que realmente desearíamos.
¿De dónde vienen las creencias limitantes?
Algunas de las principales causas por las que las personas pueden padecer creencias limitantes son las siguientes:
- Creencias familiares
- Experiencias traumáticas
- Estilo de apego, es decir, cómo te criaron tus padres
En una gran parte de los casos, las creencias limitantes se originaron en la infancia y se convierten en una parte esencial de nuestra identidad. De hecho, las personas que tienen estas creencias suelen padecerlas debido a que sienten que estos pensamientos les mantienen ‘a salvo’, cuando en realidad esto implica que no intentes crecer o no pruebes nuevas experiencias.
Ejemplos de creencias limitantes
Algunos de los ejemplos más comunes de creencias limitantes que suelen tener las personas son las siguientes:
- ‘No puedo’
- ‘No tengo tiempo’
- ‘No puedo porque…’
- ‘Necesito cambiar… Antes de poder…’
- ‘No soy lo suficientemente bueno’
- ‘Puedo hacerlo yo solo’
- ‘Todos conocen su propósito en la vida, menos yo’
- ‘No sé lo que quiero o no sé lo que necesito’
- ‘Soy como todos los demás, nunca seré alguien especial’
- ‘Me juzgarán’
- ‘Siempre fracaso’
- ‘Soy estúpido/a’
- ‘No tengo suficiente dinero’
- ‘Esto no es posible para mí’
- ‘Es demasiado tarde’
¿Cómo puedes superar tus creencias limitantes?
Superar nuestras creencias limitantes no siempre es fácil, especialmente si no has sabido identificarlas o no eres consciente de ellas. Por lo tanto, para poder superarlas o enfrentarlas, deberemos tener en cuenta lo siguiente:
- Identifica tus creencias limitantes: El primer paso para cambiar estas creencias es tomar conciencia de cuándo y por qué las tenemos. Entonces, deberías encontrar por qué te aferras a esta mentira y ver la realidad detrás de cada una de ellas.
- Afronta tus pensamientos negativos: Detrás de la mayoría de creencias limitantes hay un diálogo negativo, por lo que es importante intentar afrontar estos discursos con más racionalidad. Es decir, en lugar de decir ‘no puedo’ analizar si realmente es verdad este pensamiento.
- Háblalo con alguien de confianza: Si una creencia limitante está afectando tu vida, quizá sea útil comentárselo a un ser querido. Esta persona te otorgará otra perspectiva que puede ayudarte a tomar mayor conciencia sobre estos pensamientos.
- Cámbiala por creencias potenciadoras: Cada vez que tengas una creencia limitante, intenta reformularla por una frase que te potencie y te dé energía para hacer lo que realmente deseas.
- Intenta salir gradualmente de tu zona de confort: Para poder cambiar estas creencias limitantes, deberás intentar afrontar los sentimientos negativos que te generan. Esto puede ser muy contraproducente si lo haces de golpe. Pero, si, por lo contrario, lo implementas de manera gradual, te será más fácil acabar con estos pensamientos.
- Acude a un especialista: Un coach o un profesional del desarrollo personal te podrá ayudar a enfocarte y lidiar con estas creencias limitantes y negativas hacia ti mismo/a.
Es importante afrontar estos pensamientos y cambiar las creencias que nos limitan por otras ideas que nos potencien y nos hagan sentir nuestra mejor versión. Esto nos ayudará no solo a mejorar en muchos aspectos, sino a encontrar un mayor bienestar.