¿Por qué deberías practicar yoga para dormir? Asanas para mejorar tu sueño
¿Cuáles son los beneficios de practicar yoga para dormir? ¿Qué asanas son los mejores para tener un mejor descanso? Descubre las claves para tener una mejor rutina del sueño.
Practicar yoga antes de ir a dormir puede ayudarte a liberar la tensión mental y física, lo que implica una mejor calidad para tu sueño. Por lo tanto, incorporar una práctica de yoga relajante en tu rutina nocturna puede mejorar tanto la calidad como la duración de tu descanso. De esta forma, hacer asanas de yoga antes de dormir puede ser de ayuda ante aquellas personas que tienden a dormir poco, que tienen insomnio o que tienen poco tiempo para descansar.
¿Cuáles son los beneficios del yoga para dormir?
Algunos de los beneficios que puedes obtener realizando yoga por la noche son los siguientes:
- Alivia el insomnio: Practicar el yoga con mucha regularidad puede ayudarte a controlar los síntomas del insomnio. Pero, si lo haces antes de acostarte, te permitirá conciliar el sueño mucho más rápido, así como dormir más tiempo y más profundamente. Las investigaciones apuntan a que existe una efectividad del yoga y otras terapias meditativas para tratar tanto el sueño como para promover un mejor sueño.
- Pérdida de peso: Una práctica constante de yoga para dormir también se vincula con una pérdida de peso. Esto es debido a que hacer yoga antes de acostarte te ayudará a dormir mejor, lo que tiene un efecto positivo en el mantenimiento y pérdida de peso. Además, descansar correctamente puede ayudarte a ser más consciente de tus hábitos alimenticios.
- Mejora la calidad del sueño: Los movimientos del yoga permiten que las personas puedan relajarse antes de ir a dormir. De hecho, diferentes investigaciones apuntaron a que practicar el yoga tenía un efecto muy positivo tanto en la calidad del sueño como en el bienestar general de las personas.
- Promueve la relajación: Practicar el yoga para dormir ayuda a tu cuerpo a lograr un estado de calma, es decir, de mayor relajación. De hecho, permite que nuestro cuerpo deje de lado las respuestas ante el estrés o la ansiedad.
Obviamente, todos estos beneficios se obtienen si se realizan aquellas posturas que promueven un estado de relajación en contraposición a las que estimulan el cerebro y el cuerpo. Además, si al yoga para dormir lo haces junto a ejercicios de meditación o diferentes técnicas de respiración, estos beneficios se potencian en todos los aspectos.
Ejercicios de relajación para dormir bien
Algunas de las posturas que puedes probar para dormir mejor son las siguientes:
- Cascada: Se trata de una de las posiciones más activas que puedes hacer, por lo tanto, puede ser genial para empezar tu rutina de yoga para dormir. Esta asana es una inversión suave que aliviará la parte inferior del cuerpo y proporcionará un efecto calmante en tu sistema nervioso central.
- Bebé feliz: Esta posición permite aliviar la tensión en la parte inferior de la espalda, así como las preocupaciones que sientes en la mente.
- Raíces retorcidas: Permite eliminar todo el dolor acumulado en nuestra columna vertebral, así como todas las molestias que podrían surgir al sentarnos en un escritorio o al realizar ejercicios repetitivos. Además, también permite una mejor digestión.
- Mariposa durmiente: Esta postura te ayudará a estirar la parte baja de tu espalda, por lo que también es un excelente asana para conseguir mejorar el dolor en esta zona.
- Postura del niño apoyado: No solo estira las caderas y la espalda, sino que también se trata de un asana muy relajante para nuestro sistema nervioso central.
Consejos para realizar yoga para dormir
Existen diferentes maneras de incorporar una rutina de yoga para irte a dormir. Pero, la clave para notar sus efectos es precisamente crear un hábito. Por este motivo, te recomendamos que tengas en cuenta lo siguiente:
- Establece un tiempo alcanzable: Es decir, no pretendas hacer muchos minutos de yoga antes de irte a dormir si al día siguiente no tendrás esta disponibilidad. Por lo contrario, intenta establecer un tiempo que puedas cumplir todos los días.
- Elige un tipo de yoga ideal para ti: Existen diferentes tipos de yoga por los que puedes optar para realizar estos ejercicios antes de ir a dormir. Todos pueden ser una buena idea, excepto aquellos que implican mucha energía como el hot o el vinyasa.
- Hazlo junto a técnicas de meditación: Una de las claves para conseguir un estado de relajación es precisamente concentrarte en posturas que puedas combinar con ejercicios de respiración.
- Crea un ambiente relajante: Si además de realizar yoga para dormir, también tienes un espacio relajante para descansar, esto te permitirá mejorar tu sueño en todos los aspectos.
Para poder incorporar el yoga para dormir tendrás que realizar cambios pequeños y simples en tus hábitos nocturnos. Por lo tanto, debes intentar establecer una rutina que se adapte a tus necesidades y a la cantidad de tiempo que tienes disponible.